Resumen
Investigadoras:
Instituto Centroaméricano de Administración Pública Jonattan Murillo2, Instituto Centroaméricano de Administración Pública
Recibido:
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� María Elizondo y Murillo (2020). La República Popular China en el XX Foro de la Función Pública; innovación y desarrollo.
Entender la gestión de lo público debe ir más allá de la sola revisión de las obligaciones del Estado. La sociedad y sus dinámicas recuerdan continuamente que el cambio es intrínseco de la función estatal, que se transforma y ocupa -o desocupa- espacios, los ciudadanos, también dinámicos modifican sus necesidades continuamente urgiendo cada vez más o menos intervención, dependiendo del contexto.
Esos movimientos económicos, sociales o políticos transforman las formas en que los Estados enfrentan esas necesidades. La finalidad es buscar el bienestar de la sociedad.
Ese proceso sufre una transformación multidimensional constante donde intervienen múltiples actores y necesidades que pueden ser ciudadanas, privadas, institucionales, por la eficacia y la eficiencia, pero ante todo esto la Gestión Pública debe dar pautas para alcanzar objetivos claros y claves que permitan responder a esas necesidades sociales, Vargas, Elizondo y Bonilla (2020), lo proponen como una brújula a partir de la cual se pueda identificar la ruta. Una ruta que ofrezca un mapa para navegar la incertidumbre a la que se enfrenta el sistema y que se va transformando a la vez que se transmutan las urgencias de los ciudadanos.
En este contexto los Estados generan espacios para encontrar puntos de encuentro que les permitan mejorar sus enfoques e incluso coordinar acciones, el Foro de la Función Pública de Centroamérica, Panamá y República Dominicana, hoy día Foro de la Función Pública de Centroamérica y el Caribe, por la inclusión de Cuba como país miembro, supone un espacio de diálogo para compartir experiencias exitosas entre los estados Centroamericanos, del Caribe y del mundo en general, su origen se remonta a los años setenta, donde nace como una visión de futuro para sobrellevar las adversidades que la coyuntura y los retos de aquella época representaban para las estructuras de la función pública centroamericana.
La riqueza de este Foro, potenciada en la participación de las Autoridades del Servicio Civil, Función Pública y Carrera Administrativa de los países miembros del Sistema de la Integración Centroamericana -SICA- ha supuesto un espacio deliberativo, propositivo y donde se exponen temas sobre buenas prácticas, y se comprometen a la mejora o implementación de estas, para lograr un crecimiento más próspero y oportuno para cada uno de los países miembros, bajo una visión integracionista.
En el marco de la edición número XX del Foro, realizada en enero del 2020, el país invitado a compartir sus experiencias de crecimiento fue la República Popular China, por lo que este documento además de revisar la importancia del Foro recalca las ideas compartidas por los expertos de China en este espacio.
El Foro de la Función Pública nace como una iniciativa para modernizar y promover la profesionalización de las administraciones públicas, pero además de ello, la generación de espacios de diálogo y la contribución con buenas prácticas para aportar al crecimiento de la región centroamericana de forma integral y constante.
El foro se origina en los años setenta, siendo inicialmente conocido como Reunión de Directores de Servicio Civil y de Personal del Istmo Centroamericano, la cual iba acompañada de un congreso, seminario o foro de orden internacional donde se desarrollaba un tema de actualidad. Desde sus inicios el Instituto Centroamericano de Administración Pública, ICAP ha sido la Secretaría Técnica que, en colaboración con uno de los países del SICA, desarrollan el evento y donde participa la institucionalidad del país anfitrión e invitados regionales e internacionales. Entre los años 1972 y 1987, se realizaron un total de siete reuniones, las cuales se caracterizaban por ser cerradas y generar diálogo sobre la gestión de servicios civiles y administración de personal de los países de la región, en consideración del impacto directo que tenían en el sector público. Durante el período de 1988 a 1995, se dio un cese de las reuniones, como resultado de la dinámica y el contexto de la época. En la segunda mitad de la década de los noventas, se retoman las reuniones de autoridades y encuentros de técnicos de la Función Pública, Servicio Civil y Carrera Administrativa con un enfoque más abierto e integral, sustentado no solo en la discusión técnica, sino que, además incluyera un componente de diálogo político y una amplia participación de los profesionales de las distintas áreas de la Administración Pública.
Es así como, en 1996, el Instituto Centroamericano de Administración Pública -ICAP- propone la creación de un foro regional en torno a la temática de la función pública, el cual incluyera a todos los países de la Región y fuera de carácter permanente. Desde ese momento, el ICAP se convierte en la Secretaría Técnica del foro (ICAP, 2012).
Ilustración 1.
Proceso Evolutivo y Estratégico del Foro de la Función Pública
Fuente: Elaboración propia.
A partir de entonces, el Foro de la Función Pública se realiza de forma constante, bienalmente, alcanzando un total de 19 ediciones desde sus inicios. Este evento se consolida internacionalmente como un espacio que conglomera diversas instituciones de los países miembros del SICA para la generación de diálogo en temáticas innovadoras y de interés público relacionadas con la función pública.
De ahí su importancia en continuar a través del tiempo, para mejorar la generación de lazos de cooperación bajo los mismos fines, actualizar las administraciones públicas dentro de la región, desde una perspectiva internacional, innovando y promoviendo el conocimiento que permitan mejorar la calidad de vida de todas las personas de la región.
El Foro de la Función Pública es un espacio que se desarrolla con el fin de revisar, reflexionar y analizar los procesos de innovación en relación con la función pública, específicamente de la región centroamericana y el Caribe (incorporando a República Dominica en el 2006 y a Cuba en el 2018) teniendo en cuenta los entornos cambiantes y las nuevas tendencias relacionadas al desarrollo de la gestión pública y áreas afines a esta temática, a decir, Servicio Civil, Función Pública y Carrera Administrativa.
Durante la trayectoria de este foro se han logrado identificar, desarrollar y proponer nuevas ideas y tendencias que se enfocan en la generación, transformación y transferencia del conocimiento; herramienta fundamental para el auge y la modernización de la región, más allá de sus fronteras; con una visión global y prospectiva de la función pública, que hace repensar las instituciones de Centroamérica y el Caribe desde una lógica innovadora centrada en la gestión de los recursos humanos.
Todo ello se origina debido a la necesidad de fomentar la cooperación horizontal, así como investigar y actuar en beneficio de la sociedad, para que desde la función pública ser brinden servicios confiables y acordes a las necesidades del ciudadano. Además de buscar la generación, intercambio y discusión sobre los principales avances y retos en materia de administración de los recursos humanos dentro y fuera de la región centroamericana y del Caribe.
Durante estas ediciones se ha logrado identificar 3 ejes temáticos que se repiten, a decir: i) Probidad y Transparencia, ii) Talento Humano y iii) Buenas Prácticas, integradas bajo un modelo prospectivo y disruptivo sobre las necesidades de la región y que van acorde con los objetivos de este foro, mismos que se desarrollan a continuación:
I. Crear un espacio de reflexión y discusión sobre la gestión del desarrollo de los recursos humanos al servicio del sector público, con la finalidad de constituir una capacidad técnica para un Estado eficaz, eficiente y efectivo.
II. Propiciar el acercamiento institucional mediante el intercambio de ideas, experiencias y avances derivados de la función de la Administración de Recursos Humanos, bajo el régimen de Servicio Civil y de Carrera.
III. Considerar el progreso en la aplicación de principios y técnicas modernas de desarrollo de la gestión de recursos humanos de las administraciones públicas de la Región. (Instituto Centroamericano de Administración Pública, 2018).
Este Foro de la Función Pública avanza, conforme avanzan los países y denota la importancia de incorporar temas de actualidad, que van en pro de la sostenibilidad mundial como los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS- para la contribución desde cada nación en la formulación de iniciativas más adecuadas y reorientadas a las realidades nacionales, regionales y dentro de las preocupaciones mundiales como lo son: el calentamiento global, la pobreza y una vida digna.
La gestión de conocimiento como pilar transversal de los foros, permite transmitir, y difundir las buenas prácticas que son parte del desarrollo de estos eventos; el uso de las tecnologías le ha permitido al ICAP estar en constante comunicación con la región, visualizando sus necesidades y promoviendo la actualización de las administraciones públicas para mejorar los servicios que la función pública debe otorgar a las sociedades civiles.
El Foro de la Función Pública se reinventa con cada edición y es este proceso de gestión del conocimiento y reconocimiento de buenas prácticas más allá de sus fronteras, el que le ha permitido triangular conocimiento e identificar nuevas formas y procesos, y buenas prácticas inspiradas más allá de los avances que se realicen en el espacio geográfico más cercano.
La participación de la República Popular China, en este espacio brindó una cálida pero fresca visión para entender más a fondo sus avances, pero también como la construcción de iniciativas globales como la Franja y la Ruta de la Seda pueden impactar a la región centroamericana y al mundo en general.
Es por ello por lo que, para entender el avance y el éxito del proceso de crecimiento que se ha generado desde la República Popular China, lo primero que se debe entender es como la implementación de un proceso de planificación, a decir, la Reforma y Apertura3 repensó la implicación del Estado en todos los niveles.
Entre 1970 y 1980 el gobierno del Partido Popular de China liderado por Dean Xiaoping apostó por la transformación y la adaptación, en un contexto global marcado por la crisis de los precios del petróleo y la inestabilidad política en regiones como América Latina o los países árabes, una reforma que proponía un concepto diferenciado, particular y que probablemente no fue completamente entendido hasta algunas décadas después, el de; socialismo con características chinas.
Un cambio que no ha hecho más que ampliar su escala cada día, China, es hoy en día un país que ha aprovechado sus bondades territoriales y demográficas, aun cuando es uno de los países más poblados del mundo, su superficie, especialmente en el centro y oeste del país ofrece posibilidades de crecimiento casi ilimitadas.
El modelo de crecimiento económico particular, diseñado y transformado según las necesidades del caso chino y basado en el liderazgo del Partido Popular (PPCh) no se ha detenido aun cuando es uno de los grandes dinamizadores de la economía global, incluso el contexto de salud que ocupa los esfuerzos globales actualmente.
El investigador de la Universidad de Renmin; Xu Guangjian (2018), reconoce como el desarrollo económico ha sido la marca y el reflejo del progreso social en el caso chino, especialmente porque este crecimiento ha supuesto la condición vital y necesaria para el desarrollo en la mayoría de los niveles.
Ese desarrollo económico supuso también una apuesta a la adaptación y adopción de las tecnologías (hubo una transformación de sus procesos de producción y por lo tanto una transformación de la economía a una matriz industrial) lo que en términos generales ha agregado una mejora general de los niveles de vida y por supuesto el hito histórico del caso chino en la disminución de la pobreza.
Aun cuando el ritmo de crecimiento en China ha disminuido sigue consolidándoseos como una de las economías más fuertes del mundo (Ver gráfico 1)
Para profundizar en este proceso de reforma y apertura se puede revisar la ponencia de la investigadora Yu incluido en la sección de documentos de esta revista.
Gráfico 1.
Indicadores de crecimiento económico según Xu Guangjian (2018)
Fuente: Elaboración propia con datos de Xu Guangjian (2018). Presentación en el Seminario de Políticas Públicas y Administración Pública para países en desarrollo, Beijing, 2018.
Se debe reconocer que, en el contexto actual en medio de una crisis de salud global, este crecimiento enfrenta una situación poco conocida por o menos en los últimos 30 años, pues si se compara el rendimiento de los primeros tres meses del año 2019 y 2020 se puede identificar una contracción cercana al 9,9% (BBC, 2020) así mismo la tasa de desempleo que según las fuentes gubernamentales se ubicaba a finales de 2019 en el 3,62 % (Xinhua, 2020) ha ascendido al 6,2% (BBC, 2020).
Aun así, el gigante asiático ya se ha preparado para enfrentar esta crisis a partir mayoritariamente de iniciativas ficales (Financial Times, 2020), de la misma forma la apuesta es a fortalecer y a apoyar las PYMES a través de recortes de impuestos, ajustes en las tasas de interés y facilidades de pago (Programa Asia Pacífico, 2020). Además, ese aumento en los ingresos y el nivel de vida tanto en espacios urbanos como rurales se encuentra en una mejora continua.
Para Xu Guangjian (2018) la experiencia básica del desarrollo económico y del avance social debe ser base de las estrategias y planes del gobierno. En este caso, a partir del proceso de industrialización en 1978, China ha conseguido consolidar una estructura de fabricación completa, la capacidad de fabricar equipos de todo tipo de manera rentable y además un sector constructivo sólido que se fortalece cada vez más de la relación entre el Estado y las empresas privadas (Guangjian, 2018), el reto que enfoca ahora el gobierno de ese país pasa por la apuesta a la innovación, que se revisará más adelante.
Por otra parte, la pobreza, especialmente en las zonas rurales ha disminuido de forma importante, siendo uno de los líderes mundiales en esta materia, solo en el año 2019, 10 millones de personas salieron de la pobreza en China, según los datos oficiales, alcanzado su objetivo anual (Xinhua 2019).
En este caso es importante destacar algunos elementos que han potenciado esta tendencia; primero la capacidad de invertir en infraestructura pública a partir de la máxima de que, el desarrollo económico debe promover el crecimiento a lo interno del país en aras de un desarrollo coordinado, segundo la impulsión de las capacidades del recurso humano a través de una mejora constante y continua de los procesos educativos y vocacionales, y tercero, expansión global utilizando los espacios que ofrecen las cadenas de valor (Guangjian, 2018).
Además, una de las capacidades más importantes de gestión pública de China es que ha tenido la capacidad de entender sus retos y divisar oportunidades.
Antes de la crisis de salud, sus principales urgencias tenían que ver con una apuesta por disminuir la desigualdad, intentando que exista una mejor distribución nacional del ingreso, a la vez que un desarrollo económico regional equilibrado y hacer frente a los graves problemas ambientales y ecológicos, ahora se suma la respuesta a la pandemia y la nueva normalidad -especialmente económica- a la que debe hacer frente.
Parte de esa necesidad de transformarse más allá del crecimiento económico se encuentra en la innovación y en la inversión en la investigación y el desarrollo. Desde China se entiende la innovación como “la primera fuerza motriz para conducir el desarrollo, así como un soporte estratégico para la construcción de un sistema económico modernizado” (Xi Jinping, 2016 referenciado por Qiu Xiaoqi, 2017).
La innovación en al menos dos niveles primero en términos institucionales o de gobierno y también en el marco del ecosistema de innovación empresarial.
En el primer término, Liang Ma (2018), reconoce que el proceso de transformación digital de las instituciones del gobierno incluye; el paso del gobierno analógico (offline) al gobierno en línea (online) que funcione a toda hora todos los días (24/7), que pase de los PC a dispositivos móviles, de la web 1.0 a la web 2.0, de la propaganda unidireccional a interacción bidireccional, de lo estático a lo multimedia, de los medios de comunicación tradicionales a las redes sociales, desde procedimientos rutinarios y repetitivos ha procedimientos personalizados según cada necesidad, desde sistemas cerrados hasta plataformas abiertas, desde inversiones masivas en infraestructura a la apuesta por plataformas gratuitas o de bajo costo.
El objetivo del sistema en china es alcanzar una mayor eficacia, eficiencia y transparencia en el sector público. Esa transformación en un Gobierno 2.0 supone una apropiación de espacios como las redes sociales y relaciones colaborativas, entendiendo la necesidad de que existan múltiples canales y formas de comunicación entre los ciudadanos y las necesidades que debe abarcar el gobierno. Este proceso, reconoce Ling Ma va más allá de las páginas webs o de ofrecer catálogos de acceso, existe una necesidad de conectar y generar una interrelación (engagement) entre las necesidades ciudadanas y las respuestas del gobierno, el enfoque debe ser “interactivo, oportuno y personalizado para divulgar información, brindar servicios e involucrar a los ciudadanos” (Ling Ma, 2018).
Y en relación con el segundo nivel, su interés es construir un ecosistema de economía para la innovación, es decir, convertir el concepto de hecho en China, por “Creado en China” (Xinhua, 2018). En esta área ya se están generando los impactos, por ejemplo, en los espacios tecnológicos son muchas las empresas chinas que dominan los mercados, por indicar algunas; Alibaba (ventas por internet), Haier (electrónicos y electrodomésticos), Tencent (telecomunicaciones y tecnología), no solo son competidoras a nivel global, si no que lideran los procesos de innovación (Greeven, Yip y Wei, 2019).
Además de estas compañías multinacionales, que tienen como base el apoyo del gobierno chino, el impulso en espacios donde las pequeñas y medianas empresas se den a conocer para que estas mejoren sus procesos de competitividad, es una de las prioridades actuales y es donde está el verdadero impacto de los procesos de innovación, “miles de empresas innovadoras están interrumpiendo silenciosamente en numerosas industrias, superando a los titulares y desarrollando nuevos productos y nuevos modelos de negocio4” (Ibid).
Este ecosistema de innovación en el espacio económico se ha nutrido de un amplio proceso de transformación que no solo es gubernamental si no que es también institucional, le reporte Rising Innovation in China 2019 de Dellotitte reconoce como parte fundamental el proceso de evolución del ecosistema de innovación tecnológica de este país, especialmente la labor de las ciudades por generar las mejores condiciones posibles para potenciar los procesos innovadores a través de empresas que fomenten la investigación, el desarrollo y la habilidad por crear estructuras que faciliten la competitividad y la sostenibilidad de los procesos.
Pero este tipo de innovación, concentrada en construir un espacio económico moderno, actual, que se adapte al mercado es solo una de las aristas.La innovación del Estado y constante apuesta por la modernización de procesos y trámites, así como la identificación de espacios donde las instituciones estatales sean responsivas es una de las apuestas del gobierno chino.
De acuerdo con los objetivos del Foro de la Función Pública, el común denominador de las ediciones es la generación de conocimiento para lograr una nueva forma de gestión acorde a la actualidad, enfocándose siempre en un principio de prospectiva de la función pública, de manera que la finalidad de todas estas labores sea en beneficio del usuario, así como del desarrollo social y regional Desarrollándose en 3 grandes ejes de acción, a decir, i) probidad y transparencia, ii) talento humano y iii) buenas prácticas, que contribuyen a la gestión del conocimiento para con la región, dentro y fuera de la misma; donde la tecnología, la transparencia, la política, el desarrollo del talento humano y los derechos humanos ligados a un trabajo digno, han surgido como prioridades durante el desarrollo de estas ediciones del Foro de la Función Pública.
El Foro del año 2020, incluyó las experiencias de la República Popular China, como proceso de aprendizaje de buenas prácticas para la región, especialmente en términos de sus aportes a la Innovación Pública.
En el evento, se presentaron ponencias (que están incluidas en la sección de Documentos de la revista centroamericana de administración pública), que permitieron no solo comparar los entornos sino avanzar en espacios de colaboración y cooperación, aprendiendo de las lecciones que el país asiático tiene que ofrecer.
El Foro avanza, conforme avanzan los países y denota la importancia de incorporar temas de actualidad, que giran en torno a elementos de sostenibilidad mundial como los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS- y de preocupaciones mundiales como lo son la disminución de la pobreza, la oportunidad de una vida digna y el mejoramiento de la eficiencia y eficacia en la gestión pública.
Sumado a estos elementos la gestión de conocimiento como pilar transversal de los foros, ha permitido transmitir, y difundir las buenas prácticas, por ejemplo, a través de herramientas como este artículo, permitiendo visualizar sus necesidades y promoviendo la actualización de las administraciones públicas para mejorar los servicios que la función pública debe otorgar a las sociedades civiles.
Traducción propia
En el contexto actual, es urgente seguir aprendiendo de los procesos de innovación y buenas prácticas que ofrecen socios como China, por lo que es una necesidad generar y participar en foros, espacios de discusión y aprendizaje, que además, ahora pueden ser virtuales y ofrecer nuevas formas y oportunidades para entender la realidades globales, megatendencias.
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