Núm. 26 (1994): La Gestión de la Cooperación Internacional
Probablemente, en el futuro, no retornarán a Centroamérica los volúmenes de ayuda económica del decenio de los ochenta cuyas estimaciones ascienden aproximadamente a unos 14 millones de dólares entregados a los países del área, entre 1981 y 1991 por los gobiernos extranjeros, organizaciones no gubernamentales.
Actualmente, existen otras prioridades en el mundo que deben ser atendidas con recursos de la cooperación internacional, tales como el Medio Oriente, África, Asia así como, los antiguos países socialistas de Europa Oriental.
Esto nos trae como resultado una tendencia inevitable de disminución de los recursos hacia la región, y por lo tanto se nos plantea la disyuntiva de "hacer más con menos".
El cambio en el flujo de cooperación internacional ha creado una situación nueva en la que hay aspectos positivos y negativos. Así, los países cooperantes como la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y Japón, extreman cada vez más las preocupaciones y el destino de los fondos que proveen para evitar que se repitan las experiencias de corrupción y "telaraña" burocrática. Sin embargo, todavía existen obstáculos que entorpecen la llegada de fondos a las poblaciones base. Entre los problemas más graves podemos citar: gastos operativos altísimos, proyectos formulados desde el escritorio, poca capacidad institucional para ejecución de los mismos, incumplimiento de objetivos, acciones de poco impacto social, falta de medición de resultados y el poco cumplimiento en la rendición de informes. La lista podría seguir de esta manera evidenciando la necesidad de desarrollar las capacidades gerenciales en esta área.
Ante esta situación, el Instituto Centroamericano de Administración Pública, ICAP, ha venido ejecutando con apoyo financiero del Plan Especial de Cooperación Económica para Centroamérica, PEC, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, un programa de capacitación para enfrentar dicha problemática. En este programa han participado más de 40 funcionarios públicos centroamericanos que se han capacitado no solo en aspectos de gerencia, información, negociación de la cooperación internacional, mecanismos y procedimientos de los organismos bilaterales y multilaterales sino también en métodos y técnicas para capacitar a terceros, porque la meta en este programa ha sido contar con un grupo amplio de funcionarios de todos los niveles del aparato estatal, sector privado e instituciones regionales que contribuyan a modernizar la gestión de la cooperación internacional en la región.
De esta forma, coadyuvamos a orientar los esfuerzos y buenas intenciones de la cooperación internacional, para que sus resultados lleguen a aquellos grupos que realmente la necesitan.