Núm. 19 (1990): Reforma del Estado
Los procesos de democratización política que se han venido perfilando en Centroamérica en los últimos años han sido acompañados por un proceso de Reforma del Estado que pretende en primer lugar, promover la participación ciudadana y mejorar su representatividad y en el segundo lugar, lograr una modernización del Estado para que éste se inserte dentro de las nuevas políticas económicas de ajuste estructural que se están implementando en casi todos los países de la región.
La reforma del Estado se concibe como un instrumento de apoyo a la apertura económica, la democratización de la sociedad y el saneamiento de las finanzas públicas. De esta forma, este proceso se torna en una escuela para administrar la escasez de recursos con que cuenta el Estado y lograr un aumento en la eficacia, eficiencia y productividad.
La reforma del Estado ha requerido diversas acciones: reformas tributarias para mejorar la base de recaudación y eficiencia tributaria, reformas en el sector bancario/financiero, saneamiento de las finanzas públicas y una promoción de la desconcentración y descentralización de su aparato administrativo.
Este proceso se ha planteado en la mayoría de los países centroamericanos y lo que los diferencia son las acciones implementadas hasta el momento. Los casos que se presentan en este número de Guatemala, Honduras y Costa Rica dan crédito de ello. Sin embargo, el objetivo perseguido es el mismo: lograr una mayor eficiencia y eficacia con un aparato estatal que responda a los constreñimientos de orden económico que son impuestos por la aplicación de las políticas de ajuste estructural.